Otra vez, como muchas ya, me encuentro frente a tí,
por desgracia este bardo no tiene hoy palabras para tus oídos.
Sería muy pretencioso culpar a las musas, pues no es su ausencia el motivo,
tampoco es el público, el miedo escénico lo perdí hace mucho tiempo.
Todas mis palabras salen del corazón, ese corazón que te pertenece a tí,
y por más que embellezca mis frases estos sentimientos son indescriptibles.
Con esta adelantada disculpa comienzo mi melodía de hoy:
En días como hoy me fijo que cuando hay turbulencias me agarro con fuerza a tu mano
para que me salves.
En días como hoy me fijo que cuando hay calma me agarro con fuerza a tu mano
para que me mires.
Me resulta un poco extraño mirar atrás y ver que en un ayer estábamos separados, pues cuando estoy contigo siento como si llevaramos toda la vida juntos.
Me resulta increible la manera que me arrancas una sonrisa con un simple beso;
Lo cierto es que a tu lado he vivido muchísimas cosas importantes para mi, me pregunto si tú lo ves igual.
Y admito que quisiera vivir entre tus brazos eternamente.
No es que haya perdido el compás,
es que mi corazón va tan rápido que no sé coger el ritmo.
Y no es que haya perdido la cabeza,
es que estoy enamorada.
Pasaría siglos a tu lado y seguirías sorprendiéndome como haces cada día.
Quizás por eso estoy estoy demasiado afectada como para recitar, pues todo se dice con un simple:
Te amo.
En fin, llevo bastante tiempo pensando que decir y la verdad es que siento que sobran todas las palabras, pues ¿Qué puedo decir que ya no se sepa?
Llevamos un año de camino que relativamente es mucho o poco según como se mire, lo cierto es que nunca podría haberme imaginado enamorarme tanto de alguien como lo estoy ahora.
Simplemente que te amo...
