Todo cambia y no podemos evitarlo.
Sin embargo la clave está en dirigir esos cambios en la dirección que nos convenga y utilizar la propia fuerza de ese cambio en tu favor cambiando su trayectoria.
Pero, una vez te sumerges, vuelves al punto de partida...Vuelven a haber mil aves negras aleteando en el interior y apenas dejan ver la luz del sol. Vuelta a todo.
Mismos refugios, mismas armas...Y todavía sin plan.
Pero algo es seguro, al menos el sol sigue brillando ahí arriba.
2 comentarios:
Las cosas ocurren porque ocurren... y aquellos actos por intentar cambiarlo puede fracasar. Mejor que intentar evitarlo es evitarlo, pues si lo consigues es porque nunca ha debido de ocurrir, y lo evitas porque ha tenido que ser así.
Bueno, pues a aprovechar el letargo para volver con más fuerzas :)
Un besazo!!!
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